Lesiones por mal uso del ratón
¿Alguna vez te ha dolido la mano, el codo, o el hombro por estar mucho tiempo delante del ordenador?
Quizás no te hayas planteado que era por un mal uso del ratón. O peor aún, ¡por no usar ratón! Las malas posturas mantenidas son la principal causa de dolor musculoesquelético. Dos de las lesiones más comunes por hacer un mal uso del ratón y el teclado, o por no usar ratón, son el síndrome del túnel carpiano y la epicondilitis.
¿En qué consisten el síndrome del túnel carpiano?
El síndrome del túnel carpiano se debe a una compresión mantenida del nervio mediano, en su paso por la muñeca. Esto ocurre si la muñeca se encuentra en posiciones forzadas durante largos periodos de tiempo, ya que de este modo hay estructuras como ligamentos, la cápsula articular, los tendones, e incluso los vasos sanguíneos y los nervios que están en hiperextensión y al mismo tiempo en compresión contra los huesos. Por hacer un símil, imagina una cuerda que pasa por una polea, y que tiene atado en su extremo un peso. ¿A que no pondrías tu dedo entre la cuerda y la polea? Porque ahí hay mucha compresión. Pues eso está ocurriendo en tu muñeca si está mucho tiempo en una posición forzada.
En concreto, en el síndrome del túnel carpiano se comprime al nervio mediano, el cual es responsable de la sensibilidad de la mayoría de los dedos de la mano, a la vez que de la motricidad del pulgar. Por ese motivo en esta lesión nos encontramos con hormigueos en los dedos, adormecimiento de los mismos, dolor, e incluso pérdida de fuerza.
El síndrome del túnel carpiano es la neuropatía por compresión más prevalente, afectando a más del 5% de los trabajadores que utilizan el ordenador para trabajar rutinariamente. Es más frecuente en mujeres de mediana edad.
¿Y la epicondilitis?
La epicondilitis se trata de una afectación de los tendones de los músculos extensores de la mano y de los dedos, generalmente por sobreuso o por una mala ergonomía. Si mantenemos la mano del ratón en tensión o si no utilizamos ratón, estos músculos estarán en constante contracción y acaban acumulando fatiga, que puede derivar en inflamación y dolor.
El dolor en la epicondilitis se sitúa en la cara externa del codo, pudiendo extenderse hacia la mano, y si no se trata pronto y correctamente deriva en una pérdida de fuerza de la mano para coger objetos, abrir cerraduras, o incluso nos afecta a la movilidad del codo y la muñeca.
La epicondilitis o codo de tenista es una de las enfermedades laborales más frecuentes, pudiendo causar bajas de larga duración debido a la incapacidad funcional que provoca.
¿Cómo evitar estas lesiones?
Los expertos recomiendan que a la hora de utilizar el ratón se tengan en cuenta estas pautas:
– Apoyar la totalidad del antebrazo en la mesa.
– Utilizar ratones ergonómicos, o almohadillas para el ratón.
– Realizar pequeñas pausas de vez en cuando.
-Intentar relajar la mano.
Y quizás el punto más importante es realizar ejercicio físico habitualmente, siguiendo un programa bien estructurado como el de la formación de Healthy Workplace.
Por último, si con todo esto no fuera suficiente, en cuanto empiecen pequeños síntomas de molestia o dolor, acudir rápidamente a un fisioterapeuta antes de que se agrave.